martes, 5 de agosto de 2008

Gustos y disgustos

Me gusta recordar la primera vez que sentí la arena de la playa embadurnando todo mi cuerpo, pegándose a mi piel cada grano insignificante, hasta cubrirme toda de agua y sal y arena, y sacudirme el polvo de tantos años refinando mi educación. Me gusta recordarlo para no olvidar la intensidad de la vida en su calidad natural, sin remilgos, sin complejos. Me gusta aumentar el volumen de una canción, que por repetida no deja de ser menos hermosa, y en medio de un buen atasco matinal, lo es aún más. Me gusta contar hasta diez antes de enfadarme, porque para entonces ya se me ha pasado el mal humor. Me gusta sonreír a quien se enfada, porque mi sonrisa le devuelve su imagen más grotesca. Odio caer en comentarios como el anterior que ponen al descubierto lo peor de cada uno. Me gusta llegar a casa, y oír las voces de mis hijos aunque sea peleando. Creo que me gustan demasiado mis paredes que dan refugio a mis miedos y de tanto como me gustan , temo. Me encanta saber que mis amigos están al otro lado del teléfono y contestan mi llamada. Me gusta saber que cuentan conmigo y todos contamos lo mismo. Me gusta mirarme al espejo y descubrir una arruga más, aunque trate de esconderla con esos polvos mágicos que no engañan a nadie pero te hacen parecer más guapa. No me gustan los kilos que se empeñan en recordarme que debo renunciar a las cañitas de los domingos, practicar con más energía un poco de gimnasia cada día, no comer pan, ni picar entre comidas. Odio todos los deberías porque mientras debo, no pago mi deuda, y las deudas me gustan aún menos. Y lo que menos me gusta de todo, es enredarme en pensamientos que chocan unos con otros hasta perder el sentido. Pero me consuela poder pensar en mis hijos cuando todo parece hundirse. Ellos son mi mayor gusto. Me maravilla observar cómo se cuadra su mentón y en su caras de bebés aparece una barba que anuncia el paso del tiempo. Y escuchar sus voces sonoras, como si hablaran dentro de una botella que me arrancan una sonrisa de satisfacción por haber llegado hasta aquí. Y me gusta hoy, saber que todo vuelve a empezar con otro peque en casa al que llenar de besos. Me gusta vencer al sueño y escribir aunque deba dormir, y desafiar al reloj y creer que puedo ganar, aunque sepa que mañana me ganará él a mí. Me gusta que haya sol cuando estoy contenta y que la lluvia me acompañe cuando no tengo ganas de salir, pero aún mejor es, cuando abro los brazos y estoy dispuesta a recibir al día, tal y como se le antoje despertar. Me encanta sentir las caricias de mi amante y sentir cómo se eriza la piel a su contacto y desfallecer de placer. Y entre medias de todo lo que me gusta, me ahoga el mendigo en mitad de la calle pidiendo una moneda, mientras me pregunto si me dará tiempo a darle algo antes de que el semáforo se ponga verde. No me gusta el desprecio con el que giramos la cara hacia el otro lado para ver lo que no nos gusta ver, ni la indiferencia con la que pasamos de la calle Luna a la calle Gran Vía de Madrid. No me gustan las peleas con puños, ni la hipocresía de los políticos contando mentiras con la mejor de sus sonrisas. No me gusta que hayan quitado los cines de la ciudad, pero aún me gusta menos que los hayan quitado porque la gente no va a sus salas a disfrutar de la gran pantalla. Odio pasar un sábado en un centro comercial lleno de niños llorando, porque preferirían estar en el parque jugando. Me entristece perder de vista a los buenos amigos. Me espanta que me venza la desidia y me atormenten los recuerdos, los buenos y los malos. Me gusta salir de fin de semana y perderme por un rincón cerca del mar para poderme olvidar, aunque sea por dos días, de todo aquello que me encoge el corazón y congela mi cerebro.
Me gusta imaginar un mundo mejor donde quepamos todos, sin tener que saltar alambradas, ni esconder el hambre en el desierto. Me gusta nadar sabiendo, que en la orilla me espera mi amor y escribir con la esperanza de que alguien pueda leer sin aburrirle lo que escribo.

17 comentarios:

Anónimo dijo...

Y a mi me gusta ser tu AMIGA. Desde la tierra de las meigas besosss

carmen jiménez dijo...

Amigas como tú son las que nunca quisiera perder de vista.
Besiños...

Unknown dijo...

Aburrirse imposible. Nada más ameno que los amores y los odios. Los gozos y las sombras. Qué bueno leer todo esto, para identificarse y para diferenciarse. Yo me desentendí de los debería hasta hoy y se me están apareciendo los acreedores todos juntos...

carmen jiménez dijo...

Pues fíjate Santi, que no había pensado yo en eso de los acreedores aunque lo intuía cada vez que leía sobre sacudirse eso de los "deberías" como cura a todo y es que a veces uno debe hacer lo que debe hacer para mantener el equilibrio de su universo. Y en eso ando.
Saludos.

Unknown dijo...

Hola Carmen. Como no sé si volverás por mi posteo,te cuento que puse una larga respuesta a las damas (por ahora damas) conmovidas por los textos de Idea. Con respecto a lo que dices sobre ventilar intimidades, la publicación de esos textos fue autorizada por Idea. Gracias por tu recomendación de la correspondencia de Chéjov, aunque dudo que aquí pueda conseguir eso.
Si tuviera tu dirección de e- mail te podría enviar los poemas de Idea que no son tan conocidos como las Cartas de Amor, pero que para mí son aún más golpeadores, como los incluidos en "Por aire sucio", "NO", "Pobre Mundo", etc.
Si te interesa, mi e-mail es: bosco.barrios@gmail.com , me mandas un mensaje cualquiera, así yo tengo tu e-mail y puedo mandarte cosas.

Anónimo dijo...

Yo tambien imagino un mundo mejor . El espìritu olimpico serà: Me cabrea lo falso de la burbuja en donde se celebra estos juegos. Con miles de soldados y policias por todos los rincones misiles cercan y protegen Pekin.Me cabrea Carmen rebelde el silencio complice de las democracias que estan indiferente ante las persecuciones a esas miniorias que lichan por las libertades y denuncian la corrupcion estatal . En fin que el aire o aires de Pekin y de estos juegos son para mi irespirables. Como tu dices se me encoge el corazón. Besiños. Tabajete

carmen jiménez dijo...

Tú sí que eres rebelde Taba. Sigue así y no te dejes deslumbrar por la luces, porque ya ves...tras la voz de un ángel nos vendieron una cara bonita. Un gusto compartir contigo los gustos y disgustos. ¡Hay tantos!
Saludos compare (¿se dice así?)

Marta dijo...

Hace tiempo hice un ejercicio literario de desbloqueo que consistía en esto que tú haces: me gusta/no me gusta. Tu texto me gusta.

Carmen dijo...

Carmen, me gusta tu forma de ver el mundo y tu forma de contármelo.

Un beso.

Marisa Peña dijo...

Acabo de descubrir este otro blog tuyo ( parece que a muchos nos gusta lo de bifurcarnos, yo también lo hago), y me gusta muchísimo... Leo tus entradas y siento una empatía profunda, me conmuevo contigo y te siento cercana. Un abrazo

carmen jiménez dijo...

Me alegra que mis gustos y mis disgustos puedan conmover a otras personas. No encuentro mejor forma de acercamiento que tener la posibilidad de leerte en tu blog y disfrutar como disfruto, mientras me emociono con tus poemas.
Un saludo.

LSz. dijo...

El elogio de la repetición que gusta. Sí, a mí,igual que a varios, que a ti, me gusta. Saludo de blog recién descubierto.

carmen jiménez dijo...

Menos mal que el correo avisa de los comentarios que se dejan, porque he de confesarte que este blog parece que estuviera cerrado por defunción, y es una alegría saber que mi otro yo sigue vivo.
Gracias por tu visita. Me alegra compartir gustos y disgustos.
Saludos

Jesús Arroyo dijo...

Y yo perdiéndome este espacio...
Has escrito todo un sentido "credo".
¡Me gusta1
Besos, C.J.

carmen jiménez dijo...

Ay Jesús! Me parece mentira incluso a mi, volver a este espacio y sentir que todavía queda oxígeno en él.
Un gusto respirarlo de nuevo.
Besitos.

Silvia Teresa dijo...

Bueno, ya veo que tenemos mucho en común

Arcadia dijo...

Pero qué entrada más increíble. Y yo por qué siempre leo más tu otro blog que éste? Me GUSTA MÁS éste.

Mil millones de besos